Sigmaroteca
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Nighthaunt-0

Para los intemporales Nighthaunts el tiempo es inmaterial, una medida sin sentido, pues la suya es una existencia fantasmal de final eterno. A continuación figura una crónica de las principales hazañas de los Nighthaunts a lo largo de cada una de las eras del mundo.

Era de los Mitos

Mucha actividad de Nighthaunt durante estos años. Aun así, es poco común ver ejércitos enteros compuestos por Nighthaunt.

  • Señor de los Muertos

Al principio de este periodo Nagash reclama el dominio sobre Shyish y construye Nagashizaz, una gran ciudadela y sede de poder. Sus Mortarcas serán los encargados de hacer cumplir su voluntad den todo el reino.

  • El tiempo de los nuevos comienzos

Durante la alianza entre Sigmar y Nagash, se fundan docenas de ciudades en Shyish. En algunas como Gothizzar, Forjaglymm, Mortistan y Sepulchtan, sus ciudadanos mortales se comprometen directamente con Nagash o bien patrocinan un Culto de la Muerte que tiene el beneplácito del Gran Nigromante. En otras como Shadespire o Hawthorne Este, la falta de respeto por Nagash supone su final. Tal es la naturaleza de Shyish, pues se trata de un lugar de finales, no de nuevos de comienzos.

Era del Caos

Las incursiones ocasionales y a pequeña escala en Shyish, a cargo de los seguidores de los Dioses Oscuros, dan paso a invasiones en toda regla.

  • Tormenta de Almas

En la Batalla de Pico Endecha, los no muertos sufren grandes pérdidas y son incapaces de resistir el ataque masivo de Bloodletters dirigidos por el Bloodthirster Kharkhan. Las tierras de los héroes caídos en el Reino de la Muerte siempre han sido codiciadas por Khorne. En su desesperación Nagash arranca las almas de mil prisioneros mortales y las usa para alimentar una gran invocación. En respuesta, los espíritus de todo el inframundo de Nordyrie, una región al norte del Cementerio Sin Fin. En Hallost, responden a la llamada. En vida, todos fueron héroes, pero dejaron sus espadas alegando que sólo peleaban por una causa que lo mereciese, nunca por dinero. En la muerte, la maldición de Nagash los había convertido en despiadados mercenarios que combatían a cualquier enemigo si se pagaba su precio en almas. La hueste espectral no se limita a frenar el avance de los daemons, sino que los derrota por completo. Solo Kharkhan escapa de la destrucción. Los Nordyriae se convierten así en la primera hueste completamente integrada por Nighthaunts que se recluta para cumplir un propósito específico.

  • La Caída de Dolorum

Antaño la mayor civilización de Shyish, el imperio de Dolorum, cae durante la Era del Caos. La última soberana de esas tierras, Lady Olynder, es maldecida por Nagash para que su espectro sienta el dolor de los reinos.

  • Grandes traiciones

Los miembros del Panteón de Sigmar se distancian y se dividen cada vez más. Nagash tiene pruebas de que Sigmar está reteniendo almas para que no vayan a los inframundos. En la Batalla de los Cielos Ardientes, la ayuda prometida por parte de los no muertos nunca llega y Sigmar culpa a Nagash por la derrota resultante, acabando así de manera abrupta con sus alianzas. Incluso en ese período de invasiones constantes del Caos en todos los Reinos Mortales se producen batallas entre antiguos aliados de las fuerzas del Orden.

  • Chainwraiths

Los Idoneth Deepkin del enclave Mor’phann hacen incursiones por todas las fronteras de la Gran Ciénaga. En su búsqueda de almas entran en el Valle de las Cadenas, liberando por accidente una hueste espectral que fue maldecida por Nagash a sufrir tormento eterno. Los Chainwraiths, viéndose libres de nuevo, deciden entregarse a matar a los vivos, pero también buscan venganza contra cualquier no muerto que sirva a Nagash.

  • El Falso Rey

Kurdoss Valentian casi logra usurpar la corona de Khajhi, pero su cobarde intento golpista es efímero y atrae la ira de Nagash, de modo que al morir recibe una terrible maldición.

  • Ruina

En el punto álgido de las invasiones del Caos, Nagash intenta contraatacar. En la batalla culmen de la Guerra de los Huesos es derrotado por Archaón, y su forma física queda destrozada. Mientras se regenera lentamente, en la seguridad de un inframundo oculto, las fuerzas del Caos arrasan ciudades, profanan los lugares sagrados e incluso llegan a saquear Nagashizzar. En medio de las ruinas se alzan los símbolos de sus Dioses Oscuros. Durante este periodo de supremacía del Caos sólo los Nighthaunts son efectivos en la lucha contra ellos, pues incluso los Mortachs han huido a esconderse. Varias fuerzas Nighthaunts crecen en notoriedad, incluida la Hueste Resplandeciente, una horda extrañamente luminiscente surgida del Pantano Reluciente que cuenta con no menos de doce Tomb Banshees, la Grimguard, formada por parias de la ciudad de Gothizzar, ahora controlada por el Caos.

Era de Sigmar

A la vez que Sigmar libera a sus Stormcast Eternals, un renacido Nagash reaparece de pronto, invoca una tempestad de magia amatista, alza sus legiones y lanza cientos de ataques para expulsar a los invasores del Caos.

  • Batalla de Osseia

Llegan más Stormcast Eternals a través de Shyish, y las batallas en Ossia se hacen particularmente feroces. A medida que los maremotos vivientes se alzan, se forman nuevas alianzas entre las dos facciones antaño distanciadas. Con la llegada de los Mortachs las fortalezas del Caos caen. Nagash nunca perdonará a los habitantes de Ossia haberse dejado conquistar.

  • El Retorno del Orden

Espoleadas por Sigmar, las fuerzas del Orden se apoderan de muchos portales del Reino de importancia capital. No pasará mucho tiempo antes de que estas conquistas iniciales se expandan para convertirse en fortalezas y luego crezcan rápidamente a ciudades, a medida que los pueblos libres se congregan en florecientes civilizaciones.

  • Portentos Malignos

Deidades y magos duchos en las artes corruptas leen augurios malignos en el aire. El plan de dominación de Nagash es al fin detectado y muchos ejércitos acuden a Shyish para detenerlo.

  • Necroseísmo

Mediante ataques diseñados de manera expresa para retrasar a sus enemigos, Nagash casi logra rechazar a aquellos que pretenden invadir Shyish y arruinar sus planes. Sin embargo, los agentes skavens acaban por contaminar la Gran Pirámide Negra. El necroseísmo resultante manda a través del cosmos ondas masivas de energía nigromántica que propicia la creación de Nadir de Shyish. Se alza una Reina Después de una larga búsqueda en la que Nagash se aventura en todos los inframundos conocidos, el Gran Nigromante elige a Lady Olynder y la nombra su Mortach of Grief.

  • Campo de batalla Shyish

La primera tarea de Lady Olynder es expulsar a las fuerzas del Caos que aún dominan Shyish, Más de procesiones de Nighthaunts son lanzadas a la refriega, luchando junto a las legiones de Nagash. Los demás Mortachs lo ven como una ocasión de que Lady Olynder muestre de qué está hecha. Mannfred von Carstein y Neferata son quienes más reservas tienen sobre la recién llegada, pero al final todos los Mortachs se dan cuenta de que, de hecho, Olynder es una adición formidable a sus filas.

  • Incursiones de las Nubes

Una flota aérea de Kharadron Overlords intenta construir una base desde la que saquear el oro aetérico que flota sobre Shyish, La capacidad de ese material para permanecer por encima de las nubes los había mantenido a salvo de muchos enemigos, pero no de la baronesa Ravenblack y su procesión de Blackguards. Los duardin son barridos por bandadas de Dreadscythe Harridans. Uno por uno, los cañones Kharadron quedan en silencio, y sus naves caen en picado desde el cielo.

  • Breve alianza

En muchos lugares, las nuevas procesiones Nighthaunt unen fuerzas con las Flesh-eaters Courts para destruir a los invasores del Caos. No obstante, estas alianzas son solo de conveniencia. En las Batallas del Lago Lethin, en los Grymfens, y durante toda la campaña de Ossvir, ocurre lo mismo. Una vez que el enemigo común ha sido derrotado, las huestes espectrales se vuelven contra los viles caníbales y los destruyen también.

  • La Reina Zarza

La Reina Zarza, némesis de la ciudad maldita de Shadespire es enviada por Nagash para amenazar a otras tierras. Su tarea es reclamar ciertas almas que han engañado al Gran Nigromante. Con la ayuda de su ejército espectral, los Espinas de la Reina Zarza, visita cada uno de los Reinos Mortales, siempre capturando el alma de su objetivo. Entre cada una de estas misiones la Reina Zarza regresa a Shadespire, pues sus ansias de venganza en ese lugar siguen sin haberse visto colmadas.

  • Al borde del desastre en Ghrun

La última batalla por limpiar a Lyria del Caos casi supone la ruina de Lady Olynder. Aunque victoriosa al final, el haber estado a punto de ser destruida a manos de un Bloodthirster le cuesta la censura de Nagash que la castiga a contraer matrimonio con el Rey de Craven, Kurdoss Valentian.

  • Las Guerras del Alma

Nagash considera que es hora de iniciar una cruzada largamente planificada para reclamar todas esas almas que considera legítimamente suyas, es decir, todas las almas que alguna vez existieron. Lanza ataques contra las facciones que le han traicionado al retener las sustancias espirituales de sus muertos, los seguidores del Caos, los Stormcast Eternsal, los Idoneth Deepkin, los Aelves de Hysh, los Sylvaneth y las Daughters of Khaine entre ellos. La primera oleada es conducida por procesiones de Nighthaunt. Dirigida por la Mortach de Grief, cada ciudad libre importante es atacada. Los Nighthaunts demuestran sin el menor género de duda que son la punta de lanza del terror de Nagash.

  • El Grimhailer

Durante los ataques de los Nighthaunts, nadie se muestra más activo que Reikenor. Una y otra vez, el Grimhailer aprovecha la capacidad de desconcierto que generan sus asaltos espectrales para aplastar a sus enemigos por completo, reclamando muchas almas para Nagash.

Fuentes

  • Death Battletome: Nighthaunt (2.ª Edición)
    • Pág. 18
    • Pág. 19
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