Las Fuerzas de la Muerte están lideradas por Nagash, el Gran Nigromante del mundo-que-fue. Habiendo absorbido el Viento de Muerte, Shyish, durante el Fin de los Tiempos, se convirtió en un Encarnado, y tras su llegada a los Reinos Mortales, se encumbró como dios de los muertos y formó parte de la Gran Alianza de Sigmar.
Los tentáculos de pura nigromancia se deslizan a través de los Reinos Mortales avanzando con la inevitabilidad de la muerte al igual que Nagash, el Señor Supremo de los No Muertos, quien se alza una vez más. Una maldad antigua, Nagash busca el completo dominio no solo de Shyish, el Reino de la Muerte, sino de todos los Reinos Mortales.
Los ejércitos de la Muerte consisten en No Muertos, compuestos por Vampiros, Esqueletos, Zombies y similares.
Urgidos por el poder inexorable de su señor nigromante, las vastas legiones de Guerreros Matraqueantes, los voraces Necrófagos y los mortales espíritus se arrojan ante los brillantes Eternos de la Tormenta.
Los No Muertos son una fuerza diferente a cualquier otra, un enemigo innumerable esparcido por la implacable voluntad de su maestro, Nagash, señor del Reino Amatista. A través de cada uno de los Reinos Mortales que están en conflicto puede sentirse esta fría influencia atravesando el mismo suelo mientras los muertos abandonan sus tumbas para alzarse de nuevo. Su único propósito es imponer la crueldad, una orden de matar a toda forma de vida, dirigidos por la voluntad inquebrantable e inmortal de su incansable amo, Nagash.
Los ejércitos de la muerte son vastos más allá de toda medida, porque los Reinos Mortales han estado en guerra incansablemente desde la Era de los Mitos, y las montañas de cadáveres de antiguas batallas sirven como terrenos de reclutamiento para las Fuerzas de la Muerte. Incansables ejércitos de Guerreros Matraqueantes avanzan para hacer realidad la oscura voluntad de su amo, con sus huesos blanqueados traqueteando y chirriando a cada paso. Los cadáveres mohosos dejados en campos de batalla abandonados son reanimados para convertirse en desordenadas hordas mohosas conocidas como los Muertos Andantes. Huestes espectrales de espectros y sombras acechan los lugares mortíferos del mundo, maldiciendo al incauto con una conducta terrorífica.
Fuentes[]
- White Dwarf Weekly nº 76.