La Gran Corte de Macilenta está formada por los desdichados descendientes de caballeros fuertemente armados y montados de Chamon. Sus filas están repletas de corpulentos mordientes que cargan de cabeza a la batalla y destripan a sus enemigos con brutal facilidad antes de atiborrarse de los cadáveres destrozados.
La Corte[]
El sentimiento del deber incumplido alimenta la locura de la Gran corte de Macilenta. Los antepasados de estos comedores de carne juraron a su emperador que hallarían las reliquias que enterró en los Reinos Mortales para mantenerlas lejos de las garras del Caos. La naturaleza y ubicación de estas reliquias se olvidó hace mucho tiempo, pero las cortes de Macilenta aún se desplazan entre reinos, buscando las criptas donde están enterrados esos tesoros y masacrando a todos los que se interponen en su camino.
Antes de caer presa de la locura, los Caballeros de Macilenta fueron combatientes firmes y diestros. Cubiertos con armadura de placas chamónica, acudían a la batalla a lomos de sus caballos, barrieron con sus cargas a ejércitos de un tamaño mucho mayor. Durante la Era del Caos, cuando su cruzada para dar con el paradero de las reliquias escondidas se hizo añicos, los caballeros se vieron obligados a cometer actos depravados, comiendo primero a sus sirvientes campesinos y con el tiempo incluso a sus fieles monturas. En su estado de ánimo trastornado se ven a sí mismos como cruzados que cabalgan en columna para derribar a aquellos que saquearían las criptas que buscan. Los mordientes mayores y más feroces lideran la carga, y sus cuerpos han adoptado proporciones enormes tras devorar la carne de sus enemigos.
Fuentes:[]
- Tomo de Batalla: Muerte - Flesh-eater Courts (2ª Edición)